Carne fresca
En nuestra carnicería nos hemos especializado en la producción, selección y venta de carne fresca en Valdemoro. Contamos con ganadería propia, lo que nos permite garantizar la trazabilidad y el bienestar animal, obteniendo un producto tierno, sabroso y natural.
Desde hace cuatro generaciones, mantenemos el sabor auténtico de la tradición ganadera. Nuestro modelo de negocio se basa en el máximo respeto por el producto; cuidamos a las terneras con mimo y dedicación, para llevar a tu mesa una carne excepcional y con origen garantizado.
Venta de carne fresca de ganadería propia
El principal valor que nos diferencia es que criamos nuestras propias terneras. Así conseguimos el máximo control sobre su alimentación, crecimiento y bienestar.
Al no depender de terceros, garantizamos:
- Carne 100% natural, sin procesos industriales ni criaderos masivos.
- Cría respetuosa, en espacios naturales y con una alimentación equilibrada.
- Trazabilidad continua, desde el nacimiento hasta la venta directa en nuestra carnicería.
Nuestros cortes de ternera
La carne que comercializamos en Piros tiene una textura, un sabor y una jugosidad inigualables, resultado de un proceso de cría y alimentación optimizado durante décadas. Porque no todas las carnes son iguales.
En nuestra carnicería en Valdemoro ofrecemos una amplia variedad de cortes, para adaptarnos a los gustos y necesidades de cada cliente. Todos ellos seleccionados y con la calidad que nos distingue.
- Solomillo de ternera. Tierno y jugoso, ideal para los paladares más exigentes.
- Entrecot y chuletón. Con un sabor intenso, perfectos para parrilla o plancha.
- Filetes de ternera. Suaves y versátiles, para recetas del día a día.
- Carne para guisar. Ingrediente estrella para estofados y guisos tradicionales.
- Carne picada fresca. Para preparar albóndigas, lasañas o rellenos espectaculares.
- Hamburguesas caseras de ternera (y otros elaborados cárnicos). Con carne 100% natural, sin aditivos.
Beneficios de comprar nuestra carne fresca en Valdemoro
Aunque pueda parecer lo mismo, la carne fresca que vendemos en nuestra carnicería tradicional no tiene nada que ver con la carne envasada que puedes encontrar en supermercados y grandes superficies. La diferencia se nota, y mucho, en el plato.
- Carne fresca. La preparamos a diario, lo que asegura un estado óptimo en cuanto a textura, color y jugosidad.
- Carne envasada. Puede estar refrigerada durante días o semanas, por lo que se vuelve más seca, cambia de color y pierde calidad.
- Carne fresca. 100% natural y lista para su consumo, sin tratamientos artificiales que alteren su sabor o su textura originales.
- Carne envasada. Puede contener aditivos para prolongar su vida útil, pudiendo afectar a su calidad.
- Carne fresca. Puedes elegir el corte exacto que deseas y adaptarlo a la receta o tipo de cocina que prefieras.
- Carne envasada. Sus porciones son estándares, de manera que no puedes ajustar ni el grosor ni el peso del producto.
Carne fresca, sabor auténtico
